En este mundo saturado de información, donde el ritmo acelerado de la vida y la omnipresencia de las redes sociales nos bombardean con opiniones y datos, surge una inquietante tendencia: la de escuchar para responder y repetir, en lugar de declarar lo elaborado por nosotros mismos.
Esta forma de comunicación decadente y ególatra que parece dominar las conversaciones actuales, deja de lado la escucha activa y empática para privilegiar la respuesta rápida y la reproducción de ideas preconcebidas.
🤷🏻♀️ ¿ A qué me refiero cuando hablo de escuchar para responder y repetir?
Me refiero a un acto superficial de escucha, siempre presente en estos días y de origen ya antiguo, desde que la señora del barrio propagaba lo que escuchaba, asi sin más . El tema es que esta tendencia hoy se extendió, se multiplicó exponencialmente y de hecho , es lo que mas encontramos en una conversación. Te lo digo porque podria decirte que "vivo de hablar" jajja y lo veo cada vez más. Hoy en día , salvo hermosas excepciones, la atención del interlocutor se centra en encontrar la oportunidad para interrumpir, refutar, o simplemente repetir un argumento previamente conocido , sin elaboración propia alguna.
🤔 ¿Cuáles son las consecuencias de la escucha superficial?
Esta tendencia, lejos de favorecer el diálogo, lo obstaculiza.
Las conversaciones se convierten en un intercambio de frases prefabricadas, sin espacio para la reflexión, la empatía, el intercambio de perspectivas, en definitiva, el crecimiento mutuo. Y es que, cuando sólo nos centrarnos en responder y repetir ideas preexistentes, limitamos nuestro horizonte intelectual, cerramos todas las posibilidades de crecimiento y promovemos la polarización, ya que nos concentramos en reforzar nuestras propias opiniones en lugar de abrirnos a otras perspectivas.
🤷🏻♀️¿Cuáles son las causas?
Varias fuerzas impulsan esta tendencia: el ritmo acelerado de la vida moderna que nos empuja a priorizar la velocidad en la comunicación y en la vida toda sin tomar el tiempo para elaborar, reflexionar, etc. Las redes sociales, con sus algoritmos que priorizan la inmediatez y la viralidad, fomentando la generación de contenidos superficiales y la respuesta rápida, donde se prioriza y ocupa el lugar del podio , aquello que se "viraliza", vale decir: se instala como verdad o se le da credibilidad, lo que más se repite, reinando la confusión y el pensamiento mágico, por sobre la inteligencia, la ética, el pensamiento crítico. Esto no es inocente, en absoluto. Como dice la frase de Julio César: "Divide y Vencerás ".
🙂Hacia una escucha más profunda👂
Es necesario cambiar el chip. La escucha activa y empática es un arte que requiere de concentración, apertura mental y la capacidad de dejar de lado nuestras propias ideas para poder comprender lo que el otro nos dice, para promover un diálogo constructivo. Es inminente para esto dedicar tiempo a escuchar, a reflexionar y a formular nuestras respuestas con cuidado. Hay una práctica que debe ser rescatada y sostenida para poder empezar a abrir nuevas posibilidades de crecimiento y de riqueza para todos: intentar comprender el punto de vista del otro, incluso si no estamos de acuerdo con él.
Es necesario recuperar el valor de la escucha profunda, de la conversación reflexiva, de la capacidad de declarar nuestros pensamientos con claridad y de la apertura a la diversidad de perspectivas. Solo así podremos construir un diálogo más rico, productivo y significativo. Tomemos además la costumbre de no tomar y repetir ciegamente todo, analicemos, escuchemos de modo activo y consciente, no escuchemos para repetir,escuchemos para comprender y luego, lleguemos a nuestras propias conclusiones.
Marisela Fortuny 💎
Locutora Nacional. Mat 7388
Consultora Sistémica y Neuro Contemplativa - Guía e Instructora.
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