¿SE SANA EL NIÑO INTERIOR?¿CÓMO?
- Marisela Fortuny
- 17 ago
- 2 Min. de lectura

El término “niño interior” se ha popularizado. Ahora bien: ¿De dónde viene?. Surge de corrientes humanistas y de la psicología popular, influenciadas por autores como Carl Jung, John Bradshaw y diversas líneas de la terapia gestáltica y transpersonal. Se refiere a la parte de nuestra personalidad que conserva las experiencias, emociones y necesidades de la infancia.
Ese “niño interior” representa las memorias emocionales tempranas, tanto dolorosas como felices. Representa las heridas infantiles, es decir, carencias afectivas, traumas, rechazos o exigencias que marcaron la manera en que percibimos el mundo y a nosotros mismos. También la espontaneidad y creatividad infantil, que a veces se reprime con el crecimiento.Más que una entidad real, el niño interior es una metáfora terapéutica para trabajar con recuerdos y experiencias no resueltas de la niñez.
Se escucha hablar mucho de "sanar el niño interior", en reflexiones, propuestas terapeuticas, etc
Ahora. ... ¿Se “sana” el niño interior?
Hablar de “sanar al niño interior” es un modo figurativo de decir que una persona integra y elabora aquellas experiencias infantiles que quedaron fijadas y siguen influyendo en la adultez. No se trata de “curar a un niño dentro de nosotros”, sino de:
• Reconocer las heridas emocionales que provienen de la infancia.
• Darles un nuevo significado desde la mirada adulta, con mayor comprensión y autocompasión.
• Atender las necesidades emocionales insatisfechas (como validación, cuidado, pertenencia) mediante relaciones más saludables y un trato más amable hacia uno mismo.
•Recuperar aspectos positivos de la infancia como: juego, creatividad, ternura, capacidad de asombro.
Este proceso se puede realizar en terapia, especialmente en enfoques como la terapia gestáltica, el EMDR (para traumas) y las terapias basadas en la autocompasión, un buen acompañamiento en constelaciones familiares, que dependiendo del caso podría ser mejor personalizado , terapia transpersonal etc.
No podemos borrar el pasado, pero sí es posible re elaborarlo, de modo que deje de ser una fuente constante de sufrimiento y se transforme en una experiencia integrada.
El proceso no implica “regresar a la infancia”, sino reconocer, aceptar y cuidar esas partes de nosotros que quedaron vulnerables. Es por ello que personalmente he integrado un modo de acompañar personas en sus procesos integrando en enfoque centrado en la persona en las terapias transpersonales que incluyen a la terapia de constelaciones y cada persona además de asistir a mis talleres acceden a una consulta personal post taller,porque es así como se puede facilitar esa integración de modo responsable y eficaz.
Cuando se habla de “sanar al niño interior” se está hablando, en realidad, de un trabajo de reconciliación con la propia historia, de elaboración emocional y de cultivo de la autocompasión. No se trata de una "curación" literal, sino de integrar las heridas de la infancia de tal manera que dejen de dirigir inconscientemente la vida adulta.
Marisela Fortuny 💎
Consultora Sistémica y NeuroContemplativa
Instructora y Guía de Bien Vivir.
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