LA TRAMPA SILENCIOSA QUE NOS HACE VIVIR LA VIDA DE OTROS

Mires donde mires vas a encontrar personas viviendo movidas por el pasado. Aún cuando se habla de ser la mejor versión, aún cuando uno se identifique como "un tipo rebelde que no sigue a nadie" . Lo cierto es que las voces del pasado están implícitas en muchos de nuestros movimientos.

El costo o resultado de esto es muchas veces una trampa que nos lleva a ser menos libres de lo que nos creemos y que declaramos que somos y después , nos preguntamos porqué terminan repitiéndose ciertas experiencias en bucle y terminamos presos de ciertas conductas que como programas se activan de diversas maneras.

Si te pones a pensar, muchas de las personas que han destacado y han dejado un legado importante, sea en el dominio que sea que hayan destacado , tienen algo en común: estás personas rompieron este ciclo , no se han movido promovidas por el pasado, han creado lo que nadie antes había creado.

El verdadero rebelde , el rebelde supremo o sagrado podría decir, no es el que se opone al pasado o a la masa , sino que es el que se mueve según la autenticidad de su esencia.

¿Entonces listo, borro el pasado? ¿Hago de cuenta como que no existe?

Nooooo, es imposible. Porque somos , según de dónde venimos familiar, social y culturalmente. Somos hoy, porque otros fueron en el ayer de la vida. El tema es que en este modo binario que prevalece en los seres humanos siempre es como si las cosas fueran "todo o nada", "blanco o negro". La sistémica mal comprendida y sobre romantizada implica el riesgo de que desde otro discurso, con otra conversación, terminemos moviéndonos creyendo que avanzamos con nuestra fuerza pero que sigamos haciéndolo prendidos al pasado desde la romantizacion, sin siquiera darnos cuenta y hasta pensando que somos libres. Al pasado no hay que ignorarlo, hay que mirarlo, honrarlo. Pero ojo, honrarlo no es rendirle culto. Honrarlo (reconocerlo) , comprenderlo y luego integrarlo , vale decir , hacernos conscientes de que cada vivencia de los que me precedieron vive en mí cómo recursos y capacidad de adaptación. Basta con que repases algo de la historia de la evolución humana.

Hay una frase de Bert Hellinger que amo, una de las tantas dice:

"Somos aptos para la vida porque hemos tenido estos padres"

Bien está frase encierra el msje al que hago referencia.

El fin último de los sistemas es la evolución y esto significa que todo sistema requiere que cada uno sea su versión más plena, auténtica y única.

Lo cuento siempre en mis clases ,yo que hace muchos años ya , bailaba danzas clásicas y luego hasta hace no taaaaaanto tiempo atrás fui cantante profesional de tangos y tuve la posibilidad de ser parte de la Orquesta del Tango de la Ciudad de Buenos Aires , aprendí en esas experiencias la esencia de la sistémica , de lo que te cuento más arriba. En un cuerpo de baile o en una orquesta sucede un fenómeno maravilloso que es todos esos elementos moviéndose como un solo cuerpo.

Ahora ... ¿Sabes cómo se da eso?. Yo si porque tu e las dos experiencias. ¿Todos están mirando al de al lado para coincidir? . No, para nada.

Simplemente cada uno, cada bailarina, cada instrumento (donde el cantante es otro instrumento) , simplemente están haciendo de la mejor manera su parte. Cuando dejas de negar o seguir sacrificial y dramáticamente al pasado o ponerlo en un altar, para simplemente saber que viven en vos los recursos que habilitaron cada uno de los anteriores con sus destinos , y entonces confías en esa fuerza y en esa aptitud para la vida como todo ser autopoietico y simplemente te moves desde la autenticidad de tu alma, de tu esencia profunda. Entonces, estarás viviendo tu máxima expresión, tu máxima realización cada vez, y acá está el punto ciego que casi nadie quiere mirar: no evolucionamos mientras sigamos discutiendo con el pasado o rindiéndole culto.

Las dos posiciones: negarlo o sacralizarlo, son la misma trampa con distinto disfraz.

Ambas te dejan girando en círculos, repitiendo destinos que no son tuyos, movimientos que no elegiste y respuestas automáticas que no te pertenecen.

El verdadero movimiento libre llega cuando podés decir:

“Esto fue. Esto me hizo lo que soy. Esto vive en mí como recurso. Y ahora elijo seguir sintiendo mí pulso interno.

Ese instante simple, íntimo y radical marca el pasaje de ser efecto del sistema a ser su evolución.

Porque al final, la vida no te pide que te pelees con tu historia, pero tampoco que la conviertas en un altar.

La vida te pide que la uses.

Que tomes la fuerza que viene detrás tuyo, la integres sin dramatismo y te muevas hacia adelante como quien sabe que cada paso inaugura un mundo nuevo.

Cuando vivís desde ahí, dejás de ser “hija del pasado” para convertirte en fuente de creación.

Y entonces sí:

tu autenticidad deja de ser discurso y se vuelve realidad .

Marisela Fortuny 💎

Creadora de Sistema Premalkimia™

Facilitadora Sistémica y Neuro Contemplativa